Construyendo momentos - I
Gestación subrogada, "Jane Eyre" de Charlotte Brontë y una conversación (im)posible
El deseo de tener un hijo y las «imposiciones» biológicas
Cuestiones en torno a la gestación subrogada.
Me estreno en La Gaceta de la Iberosfera con un tema muy complejo y polémico: la gestación subrogada. Hablo de de lo imprescindible que es no dejarla a merced del mercado sin menor control. Pero considero que la prohibición tampoco afronta ni resuelve el problema.
“La gestación subrogada es una cuestión controvertida que ha generado un intenso debate en los últimos años. Es una cuestión polémica, entre otras razones, por el carácter disruptivo que plantea sobre la procreación humana y, por ello, sobre las relaciones de maternidad y filiación. Por un lado, hay quienes la ven como una forma de ayudar a parejas infértiles a cumplir su deseo de tener un hijo, mientras que otros la consideran una forma de explotación y una violación de los derechos humanos. Las justificaciones para aceptar o rechazar la gestación subrogada van desde historias idílicas hasta las noticias más sensacionalistas y escandalosas, pasando por sucesos violentos en los que la explotación y el tráfico de personas revelan la cara oscura de este problema. Tales son los conflictos y consecuencias que ha alcanzado esta práctica, que diferentes organismos internacionales están trabajando en desarrollar mecanismos internacionales para su regulación, ya que es innegable que pueden darse situaciones de vulnerabilidad y desprotección.”
Jane Eyre de Charlotte Bronté
Justicia social, independencia femenina, el amor y la moralidad en una sociedad victoriana.
Hacía tiempo que leer ficción estaba fuera de mis apetitos literarios. No obstante, una gran amiga habló de esta novela en Twitter y, viniendo de ella, no pude resistirme a leerla. Para mi sorpresa, toda una historia repleta de historias en torno a la sociedad victoriana estricta.
Charlotte Brontë publica en 1847 esta autobiografía novelada, su primera novela. La historia sigue la vida de Jane Eyre, una huérfana que es criada por su tía cruel y luego asiste a una escuela para niñas donde también es maltratada. Después de graduarse, se convierte en institutriz en una casa donde se enamora de Rochester, el dueño. A medida que su relación con él se profundiza, Jane descubre un oscuro secreto que lo rodea y debe decidir si está dispuesta a sacrificar su amor y su felicidad por la verdad y su propia integridad moral.
La novela explora temas como la justicia social, la independencia femenina, el amor y la moralidad en una sociedad victoriana estricta. Tal es así que "Jane Eyre" es considerada una de las obras maestras de la literatura inglesa y una de las primeras novelas que pone en primer plano a una heroína femenina fuerte e independiente.
Decía que la justicia social es uno de los temas principales de la novela, pues presenta una crítica a la sociedad victoriana, que en muchos aspectos era injusta y desigual. Esto se puede observar a través de la vida de su protagonista: tratada injustamente por su tía, quien la maltrata y la relega a una posición de inferioridad y pobreza, y, posteriormente, en la escuela donde Jane y sus compañeras son objeto de un trato cruel por parte de los administradores -se benefician económicamente de la educación de las niñas pero no les proporcionan suficiente comida o ropa para sobrevivir-.
Hay que tener en cuenta que además, en la sociedad victoriana, la posición social de una persona estaba determinada por su riqueza y su clase social y Jane, al ser una mujer pobre y huérfana, se encuentra en una posición de desventaja, no teniendo acceso a los privilegios de la clase alta. Incluso cuando se convierte en institutriz su posición sigue siendo subordinada.
En este sentido, la novela critica la injusticia social de la época y defiende la igualdad y la justicia para todos. Jane es una heroína que lucha por su independencia y su derecho a ser tratada con justicia y respeto, incluso cuando esto significa desafiar las normas sociales y las expectativas de su género y su posición social.
Es una novela que aborda el tema de la independencia femenina de manera muy significativa y avanzada para su época. Jane Eyre es un personaje que desafía las normas sociales y de género de la época victoriana, buscando su independencia y libertad en un mundo dominado por una pequeña élite y por unas expectativas sociales restrictivas para las mujeres. Ella se percata de que la única forma de conseguir su independencia es a través de la educación y el trabajo. Por ello se esfuerza por aprender y mejorar su posición social, lo que le permite conseguir un trabajo como institutriz. Es más, defiende su independencia y libertad de tal modo que no está dispuesta a renunciar a ello por amor, pues toma la decisión de dejar a su amado y empezar una nueva vida en otro lugar donde, finalmente, consigue su independencia y libertad gracias a una herencia.
La novela muestra que la independencia femenina es posible, pero solo a través de la educación, el trabajo y la lucha contra las normas sociales restrictivas. Además, la novela presenta a Jane como un modelo de mujer independiente y fuerte, que valora su libertad y su integridad por encima de todo, y que está dispuesta a luchar por sus derechos y su felicidad.
Menos mal que no hay referentes en la historia de mujeres que se superan y se desarrollan más allá de los convencionalismos (léase con ironía y destinado a quienes consideran a las mujeres seres de luz, débiles y víctimas de la historia).
Conversaciones (im)posibles
Una correspondencia con Sergio San Juan.
La naturaleza perdurable de una carta se prestaba a un diálogo reflexivo y, de hecho, algunas de las conversaciones más valiosas de la historia fueron mediadas por el intercambio de cartas.
Conversaciones (im)posibles es una idea que nace como la posibilidad de dialogar con las razones ajenas para enriquecer las propias. Cartas con las que cuestionar constructivamente los dogmas de las ideologías, el pensamiento hegemónico del momento, la corrección política, las distorsiones de la realidad y cualquier tema de interés, tanto para el individuo como para la sociedad en su conjunto.
Y hoy comparto la que he comenzado con Sergio San Juan, quien tiene una newsletter sencilla, bonita y muy enriquecedora: Aprendizaje Infinito.
Querida, Cuca:
Después de meditar posibles temas para iniciar esta correspondencia, hay uno que me gustaría tratar con la pausa que creo que merece: el tiempo. Como creo que sabes, escribo con frecuencia con una finalidad bastante egoísta. Aunque comparto, en el fondo busco ordenar mis ideas y tratar de alcanzar una relativa claridad en mis pensamientos. Con ese propósito también en mente y con las ganas de conocer otra visión - espero que muy diferente a la mía -, inicio esta nueva aventura.
Me gustaría empezar con unas palabras del escritor argentino Borges: “El tiempo es la sustancia de la que estoy hecho. El tiempo es un río que me arrebata, pero yo soy el río; es un tigre que me destroza, pero yo soy el tigre; es un fuego que me consume, pero yo soy el fuego”. Leo entre líneas lo inevitable del tiempo. Como río, fluye sin que podamos detener su flujo; como tigre, nos ataca sin posible defensa; y como fuego, acaba con nosotros sin remedio alguno. La batalla empieza perdida pero como leo en el poema de Borges: somos el río, el tigre y el fuego; somos nuestro tiempo.
Música que me ha acompañado mientras escribía
Y hasta aquí por ahora.
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Muy top el enfoque y las conclusiones del artículo sobre gestación subrogada, Cuca.